¿Cuándo vence un medicamento?
La respuesta corta es: realmente nadie lo sabe.
Esto se debe a que la «fecha de expiración» que se encuentra en un medicamento es simplemente una garantía, hecha por su fabricante a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), de que el medicamento mantendrá su efectividad hasta esa fecha. La FDA no requiere que el farmacéutico realice más pruebas ni determine una fecha de expiración actual.
«Medicamentos caducados»
La FDA no permite la dispensación de medicamentos «expirados»o “caducados”, asi que los farmacéuticos se ven obligados a botar medicamentos que aún podrían ser efectivos. Reemplazar medicamentos que «caducan» cada dos o tres años podría generar enormes ganancias para la industria farmacéutica, pero es un desperdicio masivo que crea mayores costos para el gobierno y los consumidores.
(También se debe tener en cuenta que este sistema elimina efectivamente cualquier incentivo que las compañías farmacéuticas puedan tener para determinar las fechas verdaderas de expiración).
Para evitar el gran costo de reemplazar rutinariamente las reservas de medicamentos, antídotos y vacunas necesarias en caso de emergencias nacionales, la FDA y el Departamento de Defensa de los Estados Unidos crearon un programa de pruebas conocido como el Programa de extensión de la vida útil. Cada año, una selección de medicamentos de dichas reservas se analiza para determinar si sus «fechas de expiración» se pueden extender.
En otras palabras, si los análisis revelan que los medicamentos todavía son clínicamente efectivos, se les da una nueva «fecha de expiración».
Resultados del Programa de extensión
Los estudios realizados en nombre del gobierno federal han demostrado que muchos medicamentos conservan su eficacia mucho más allá de sus «fechas de expiración». ¡Algunos incluso conservan su potencia muchos años después de ella!
Y a pesar del hecho de que la FDA lo ha sabido por décadas, no ha mostrado ningún apetito por extender el Programa de extensión de la vida útil a toda la nación. Mientras tanto, las clínicas, hospitales, hogares de ancianos y farmacias continúan eliminando de manera rutinaria medicamentos que, con toda probabilidad, son perfectamente útiles y seguros.
Se estima que la implementación de este programa, o uno similar, a escala nacional para reducir el desperdicio reduciría el gasto en atención médica hasta en un 25%.
Revisando las fechas de expiración
No hace falta decir que ese tipo de ahorro contribuiría en gran medida a controlar el aumento del costo de la atención médica, algo que nos afecta a todos.
Escriba a sus representantes en el Congreso y pídales que implementen un programa para revisar las fechas arbitrarias de expiración de medicamentos. Es posible eliminar el desperdicio y controlar los precios de medicamentos recetados. El modelo ya existe.
Y ya que te estás preguntando…
La segunda parte de esta entrada discutirá si se pueden tomar «medicamentos caducados” sin correr algún riesgo.