En caso de que se le diagnostique el cáncer de la mama (cáncer del seno), no extrañaría en nada que luego del golpe inicial de la noticia entretenga un sinnúmero de opciones sobre lo que debe hacer.

Sin embargo, rechazar el tratamiento médico NO debería ser uno de ellos.

Seguramente ha escuchado alguna variación de la frase «los milagros suceden«.  A consecuencia de la confusión, la incertidumbre y el miedo causado por un diagnóstico tan serio e inesperado, puede ser tentador el cruzar los dedos y apostar a que la dicha te sonreirá.

Por favor, reconsidere.

No hay escasez de «curas milagrosas»

La Internet está llena de desinformación y de tonterías. Algunas de ellas ascienden al dudoso nivel de leyendas urbanas y consejos cuestionables – si no malos.  Peor aún, cuando la mala información es adoptada por la prensa u otros medios de comunicación y es difundida sin una verificación adecuada, se le atribuye un aura de legitimidad que no merece.

Aunque los antioxidantes, las dietas saludables, los ejercicios, y el bienestar general pueden tener efectos positivos y mejorar su salud, ninguno puede tratar eficazmente el cáncer de seno.

Puede toparse con anécdotas que involucran a alguien que optó por rechazar el tratamiento médico y logró vencer al cáncer.  Y quizás, para algunas personas, eso pudo ser cierto.  Sin embargo, esa es la excepción, no la norma.  El número de mujeres en las cuales el cáncer de seno entra en remisión ausente alguna intervención médica es indudablemente insignificante.  Las probabilidades no estarán a su favor.

Opciones de tratamiento y segundas opiniones

El tratamiento del cáncer de seno, dependiendo de su etapa diagnóstica, puede incluir cirugía, quimioterapia y / o radiación.  Cada cáncer y cada paciente es único – no existe una estrategia que funcione para todos.

Si tiene dudas sobre su diagnóstico o una estrategia terapéutica, recuerde que tiene derecho a buscar una segunda opinión.  De hecho, le recomendamos siempre buscar una segunda opinión.

Muchos pacientes tienen miedo de obtener una segunda opinión por no “ofender” o “faltarle el respeto” a sus médicos.  No se preocupe por eso.   Los médicos son profesionales y entienden el proceso.  Como pacientes, tenemos que interceder por nosotros mismos.  Nunca vacile en buscar una segunda opinión médica cuando tenga dudas o lo crea necesario.

Algo más:  Indudablemente, ha visto anuncios de «centros de tratamiento del cáncer» que prometen todo tipo de tratamientos novedosos o alternativos – usualmente en un entorno tipo centro turístico.  Le están vendiendo una experiencia, no el tratamiento real que podría salvarle la vida. 

¡Si las curas milagrosas, exóticas, o novedosas funcionaran, nadie tuviera cáncer!

Confíe en la profesión médica.

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